|
2011 Ferrari FF
El enorme motor de doce cilindros lleva por mucho tiempo situado detrás del eje delantero y, por motivos de peso, la transmisión en la parte trasera. La mayor distancia entre ejes crea cuatro asientos de tamaño
completo, pero ¿cómo integrar la tracción a las cuatro ruedas? Se requiere creatividad si no se quiere tener que guiar un eje desde muy atrás hasta muy adelante y luego delante del motor en ambos lados.
FourFour = Ferrari de cuatro plazas con tracción a las cuatro ruedas ... |
Y un coche de doce cilindros es ya de por sí bastante pesado. No, a los técnicos italianos se les ocurrió algo mejor, algo que el mundo probablemente nunca antes haya visto. Algo que, en realidad, sólo ha sido posible
gracias a los enormes avances en el sector de los embragues. Pero reconocer esto y hacerlo utilizable para su propio producto ya es un logro.
Superdeportivo familiar como sustituto de un coche de carreras ... |
Al fin y al cabo, algo en la parte delantera ya gira, concretamente el cigüeñal, aunque, por supuesto, a una velocidad equivocada. Y si instalamos aquí el mismo número de marchas que detrás y cambiamos ambas
transmisiones de forma sincronizada, no habremos ganado mucho. En el Ferrari, sólo hay dos marchas que transmiten potencia a las ruedas delanteras con dos embragues parcialmente deslizantes para la derecha y la
izquierda. Por supuesto, sólo para el rango de velocidad más bajo.
Una alternativa interesante a la tracción total permanente, sin diferencial central, bloqueos longitudinales y tonterías de ejes. ¿Y qué más tiene que ofrecer el Ferrari aparte de más espacio interior? Al menos tiene un motor
de inyección directa, pero realmente no puede sumar puntos en esta situación de bajo consumo. Cuatro cilindros más que en el SLS probablemente permiten aumentar el régimen de revoluciones en casi 2.000 rpm. Con
la misma cilindrada se obtiene mucha más potencia, pero no más par.
Pero probablemente sólo con neumáticos aptos para el invierno ... |
Se dice que la dirección es demasiado directa con poca realimentación de los frenos. Pero sabe cómo ocultar bien su peso durante las aceleraciones. En las pruebas se habla de la posibilidad de utilizarlo como primer
coche familiar, lo cual resulta ridículo teniendo en cuenta el precio de compra, aunque las inspecciones sean gratuitas durante un largo período de tiempo. Así pues, lo que queda es un superdeportivo absolutamente apto
para el invierno con un asiento trasero abatible y un volumen de 800 litros.
|
|