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 1964 Ferrari 158 F1
Se incorporó mucha tecnología nueva a este automóvil, lo que le dio a John Surtees mucho éxito a partir de la sexta carrera y le dio a él y a Ferrari el campeonato mundial en 1964. Incluso ganó dos de las carreras, los GP
de Monza y Nürburgring. La novedad del coche es la construcción con monocasco de aluminio y el motor como parte del chasis. Se prescindió casi por completo del hasta entonces habitual marco tubular. Esto ahorra
peso, pero impone mayores exigencias a la estabilidad del cárter.
La segunda innovación está en la preparación de la mezcla, que se realiza directamente en el cilindro a través de una bomba de inyección. El sistema se utilizará por primera vez en carreras con el Mercedes 300 SL. En
general, el motor tiene un 10% más de potencia que su predecesor V6. Otros 11 kW (CV) se consiguen cuando la misma cilindrada se distribuye en 12 cilindros en forma de V con un ángulo de inclinación de 180° en el
512 F1, principalmente debido a la mayor velocidad que esto permite.
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