Es importante saber que un sistema de frenos defectuoso, tiene la culpa de un accidente sólo en los casos más raros. Y cuando esto sucede, por lo general al menos está mal mantenido o incluso modificado. Incluso si el TÜV critica un sistema de frenos, no significa que su función esté a la mitad de su capacidad o incluso tampoco significa que esté gravemente afectado.

Más del 90 por ciento de las veces, es la persona quien ha reaccionado de forma incorrecta, pudiendo distinguirse comportamientos inaceptables para la conducción de un vehículo, como estar bajo los efectos del alcohol o conductas tales como velocidad excesiva o atención insuficiente.

Por supuesto, con una preparación incorrecta, los sistemas electrónicos llegan a sus límites. Hay alcoholímetros que podrían evitar que el motor arranque si es necesario, pero probablemente haya demasiadas soluciones alternativas o requisitos legales para hacerlo. ¿Y quién pediría voluntariamente un sistema de este tipo al comprar un automóvil nuevo?, ¿aquellos que están particularmente en riesgo?

Las posibilidades de los sistemas electrónicos de seguridad suelen estar limitadas a determinadas situaciones durante la conducción. Por lo tanto, debe haber desencadenantes, y deben estar bien fundamentados. Si en la pantalla del automóvil te ofrecen una taza de café constantemente, aunque te sientas en plena forma, pronto surgirá la idea de apagar esta parte o todo el sistema de seguridad.

Mientras tanto, esto se ha convertido en una completa discusión filosófica. Los aficionados a tomar las curvas haciendo derrapar al vehículo, exigen por ejemplo, la desactivación completa del ESP, que afortunadamente no es posible en muchos casos. Es demasiado fácil para las personas sin experiencia, sentarse en el asiento del conductor y olvidar volver a encender el sistema.

Lo que de ninguna manera significa que dicho vehículo esté a salvo de accidentes bajo este tipo de conductores, sino todo lo contrario. Es posible que ya vea por lo que se ha dicho hasta ahora que todavía queda un largo camino por recorrer para llegar a cero muertes o incluso lesiones en el tráfico. Después de todo, Daimler acaba de abrir una nueva sala para pruebas de choque, más grande que un campo de fútbol.

No, probablemente no seremos capaces de enseñarle al piloto medio a cómo comportarse en situaciones críticas de la forma en que los pilotos de carreras se entrenan en cada competencia. Sobre todo porque lo que has aprendido tiene que practicarse constantemente, de lo contrario se olvidará. Aparte de las maniobras de conducción críticas iniciadas por el propio conductor, el resto de la responsabilidad, por ejemplo, debido al mal tiempo, probablemente recaiga en los futuros sistemas electrónicos de seguridad.

Después de todo, ¿qué puede hacer un sistema como este si alguien que conduce más rápido que un camión en el carril central de la autopista, descubre de repente que la salida prevista ya está muy cerca y, por lo tanto, dobla a la derecha debido a que todavía tiene la intención de pasarlo a mayor velocidad en el carril de giro que ya ha comenzado?

Desafortunadamente, en este caso, también debido al asiento del conductor, se reconoce demasiado tarde un vehículo a la izquierda en este carril que ya ha disminuido la velocidad y está siendo adelantado por el camión. ¿Qué puede hacer la electrónica allí? Incluso si el sistema de navegación no está encendido debido al indudable conocimiento de la zona.

Anticiparse al accidente y reaccionar en consecuencia suele ser sólo una habilidad de los conductores experimentados. Para los menos experimentados, la electrónica todavía tiene la oportunidad de hacer tangibles los peligros, antes de que se alcancen ciertos límites. Y no sólo por su propio interés, sino por supuesto también por el de los demás usuarios de la carretera.

Créeme, hay situaciones complicadas en el verdadero sentido de la palabra, en las que incluso un profesional que de repente se pone al volante ya no puede ayudar. Debería haber reaccionado correctamente de antemano. En general, conducir con previsión y anticipación es la mejor manera de prepararse o evitar situaciones críticas.