Accionamiento del ventilador hidrostático
Un ejemplo para explicar donde se aplica el ventilador con impulsión hidrostática sirve el autobús urbano. Por regla se diferencia este del autocar por la distancia mas
corta entre ejes y el suelo mas bajo. A causa de esto se tiene que incorporar el motor atrás del todo, por ejemplo en posición horizontal en la esquina izquierda de atrás.
Así que no queda mas remedio de tener que incorporar el radiador sobredimensionado en el lateral izquierdo de atrás.
¿Por qué? Pues porque por debajo del parabrisas no hay bastante espacio y se tendría que alargar el morro o incorporar dentro en la cabina del chofer lo que molestaría
el paso libre hacia el interior del autobús.
Debajo del vehículo tampoco se puede incorporar debido a los bajos tan reducidos de altura y en la puerta trasera debe estar el acceso hacia el compartimiento del
motor libre. En la parte derecha de atrás tampoco recibe el flujo del aire de conducir, como se daría el caso colocado adelante. Esto quiere decir que aquí se necesita un
ventilador de otra manera, no adicional como sucede con el turismo sino de manera uniforme y continua.
El motor eléctrico que se necesitaría para este ventilador tendría las dimensiones de un motor de arranque y el doble de espacio libre para su enfriamiento. Tampoco es
la eficiencia tan efectiva, al tener que convertir la mecánica en energía eléctrica y después otra vez en mecánica. También el generador tendría que trabajar entonces el
doble, cuando el autobús ya por si necesita mucha electricidad.
¿Cómo se resuelve el problema? El movimiento de giro se genera sobre una bomba mediante el flujo del aceite hidráulico. Este impulsa un motor hidráulico en el eje del
ventilador. Como no se necesita siempre la velocidad máxima del ventilador, se incorpora aquí un sistema de control electrónico, el que se encarga de desviar una parte
del aceite hidráulico sobre el retorno hacia el depósito, para moderar las revoluciones por minuto. 02/12
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